sábado, 29 de julio de 2006

EL QUE PARTE Y REPARTE...

He extraído los párrafos siguientes de un mensaje que nos envió a un grupo de amigos la guionista Ángeles González Sinde. Le he pedido permiso para reproducirlo porque me ha parecido que puede interesarles a los guionistas y a los aspirantes a guionista que frecuentan este blog:

“ (…) Pues yo os cuento que sigo fascinándome con este oficio nuestro del guionismo. O sea, que nosotros ya sabemos lo que hay y lo miserable que es el trato con el productor, director, etc., pero es que no hay esperanza porque resulta de que (me gusta mucho el “dequeismo”, por cierto, quisiera reivindicarlo un poco hoy) estos americanos lo llevan peor todavía que nosotros. O igual al menos.

Ha salido un libro que se llama Doing It for Money que recoge las espantosas experiencias cotidianas de diversos guionistas de cine y TV. No lo he leído, he visto una reseña y parece interesante.

Pero, a lo que voy, que claramente hay un desfase entre lo que nosotros pensamos que es este trabajo y somos nosotros, y lo que creen los demás, si no, ¿por qué íbamos a andar siempre tan frustrados?

Otro ejemplo, hace un par de semanas en Cuba, veía yo el tipo de gente que se apunta a los talleres de guión, talleres de 15 días en verano y eso. Se me llevaban los demonios porque me daba por pensar que a nadie se le ocurre de pronto “¡ay, voy a hacer un cursillo de ingeniero de montes!”, pero sí se les ocurre hacerlo de guión. Yo creo que ellos piensan que eso de escribir guiones lo puede hacer cualquiera, y me cabrea, me ofende, pero seguramente me equivoco.

Es posible que narrar sea una necesidad básica del ser humano, la gente desea narrar, comunicar y organizar la información sobre aquello que les inquieta. El cine o el audiovisual es el medio
artístico de comunicación de nuestra época y la gente busca expresarse a sus contemporáneos del modo más eficaz. Quizá no se trate de que implícitamente desprecien nuestro oficio, como yo, siempre paranoica, pienso, sino que se reduce a que la gente está mal informada y quizá piensen que escribir guiones es "escribir películas", o sea, casi hacerlas, la expresión artística de algo.

Pero un guión no es una expresión artística como una novela, por ejemplo. Eso es lo que ellos no saben.

Nosotros quizá tampoco lo sabemos, por más que nos dediquemos a ello, y por eso nos frustramos tanto.

Creo que el concepto MONEY es crucial en esta confusión. Mucho money, mucha gente pendiente, mucha frustración”.

viernes, 28 de julio de 2006

De guiones y vías de trenes


La vía de tren abandonada sobre la que camino en esta foto, así en plan Stand by Me, pasa por el lugar donde transcurre un guión de largo en el que estoy trabajando en estos momentos. Siempre que escribo algo que sucede en un lugar real me gusta conocerlo. Tampoco es que crea que hacerlo te ayude exactamente a escribir mejor, pero siempre resulta interesante; primero porque, por mucha documentación que hayas consultado, pocas veces la realidad se corresponde exactamente con lo que esperabas encontrarte, y luego porque te ayuda a meterte en situación y a parir más y mejores ideas para contar la historia que has decidido ubicar allí. Especialmente si, como es el caso, se trata de una película de aventuras, con bastante acción. Y tampoco es una mala excusa para viajar…
Ahora toca sentarse delante del ordenador y empezar a teclear para tener dentro de unos meses una primera versión del guión que, con un poco de suerte, en un par de años pueda tener la posibilidad de convertirse en una película… o no.

lunes, 24 de julio de 2006

Otro dibujo


Bocetos de Rayco Pulido para un proyecto que hemos aparcado hasta que tengamos tiempo para ponernos con él.

miércoles, 19 de julio de 2006

Al general Saza le gustan los chicos


Últimamente cuelgo pocos dibujos, así que ahí va uno. Son el general Saza y el robot con el cerebro de Franco, de la serie de superhéroes cañís Rayos y centellas, ilustrada por Luis Bustos.

lunes, 17 de julio de 2006

Superman... ¿vuelve?

Como por ahí abajo comenté que tenía muchas ganas de verla, me siento obligado a decir qué me ha parecido Superman Returns.

Me ha gustado. Y mucho, pese al absurdo plan de Lex Luthor y la excesiva importancia que tiene su desarrollo en la primera parte de la película, y pese a que no llego a entender muy bien si este Returns es una secuela, un remake o qué.

Por desgracia, lo de los planes ridículos es algo común a todas las películas de superhéroes. ¿Por qué los malos no elaboran nunca planes con sentido? ¿Por qué son tan rematadamente idiotas? Quizá en la única en la que no ocurre es en la segunda de Batman de Tim Burton, donde el Pingüino lo único que quería era vengarse de aquellos que le habían tratado como a un “freak”.Pero vamos... que me expliquen a mi qué se había metido Magneto en cualquiera de las de X-Men antes de pergeñar sus planes malignos...

Lo bueno: las apariciones de Superman, el triángulo amoroso (al que de todas maneras no le hubiera ido mal un poquito más de intensidad), y la peculiar sensibilidad de Bryan Singer al diseñar prácticamente todas las secuencias, más propia de un discípulo aventajado de Miyazaki que de un director de cine de acción norteamericano al uso (ese plano general del parque, en el que únicamente un sonido sordo y una nube de polvo marcan el choque del cuerpo de Superman contra el suelo; la ascensión entre las nubes, hacia el sol regenerador; las manos de Lois tocando el agua del río mientras vuela en brazos del héroe...).

Entiendo que para muchos resulte aburrida, o pesada, y hasta excesivamente pretenciosa con sus algo forzadas metáforas cristianas. Pero a mi las dos horas y media que dura se me pasaron volando. Al contrario, hubiera querido ver más escenas en Smallville, visitar Krypton...

Ah, para los más fans del personaje, en este link podéis descargaros el guión de Superman que escribió J.J. Abrams y que estuvo a punto de rodarse con McG como director. Un híbrido extrañísimo entre El señor de los anillos, Expediente X y Matrix, planteado como una primera parte de una trilogía, que más que reiventar a Superman, transforma sus peripecias en el argumento de un juego de Playstation de tercera.

Para que os hagáis una idea: en esta versión de la historia, Krypton no ha sido destruido y Superman es el heredero del trono de su mundo, el héroe destinado (el "elegido") a librarle de un cruel tirano.

Y si queréis leer una buena historia de Superman, os recomiendo esta novela. Contra todo pronóstico, merece realmente la pena a poco que os interese el personaje.

domingo, 9 de julio de 2006

HABLANDO CON GUIONISTAS (2)

Ya habéis visto cómo se llama este blog. Y más de una vez me he preguntado: ¿cómo llevan otros guionistas que sólo se haga uno de cada cinco o seis guiones de los que escriben, que tantas y tantas horas de trabajo al final sean para nada? Al primero que se lo he preguntado es a Helio Mira, guionista de la película dirigida por Jordi Mollá No somos nadie y de un buen número de proyectos que todavía no se han rodado. Entre ellos, la adaptación al cine de los cómics de Sergio Bleda Inés y El baile del Vampiro y una de las siguientes películas del director Norberto López (Nos Miran). También ha escrito historietas en Sword, artículos sobre cine y cómic en revistas como Dolmen, ha impartido clases de guión y ha dirigido varios cortometrajes.

DM: ¿Cuál fue el primer guión escrito por ti por el que te pagaron? Y cuál fue el primero que se rodó?

HM: El primer guión por el que me pagaron y el primero que se rodó fueron el mismo. El título de la película fue No Somos Nadie y la dirigió Jordi Mollá, aunque el título del guión en las diferentes versiones venía siendo Dios está en el aire... ¡¡¡Y yo me enteré del cambio leyendo el Fotogramas!!! Creo que para el mercado internacional sí que se respetó el God is on the air. Por cierto, no sólo ha sido el primer guión que me han rodado, sino que hasta la fecha también ha sido el último. Si bien la tendencia parece a punto de cambiar. Por suerte, no ha sido el único que he cobrado.

DM: ¿En qué año se estrenó la película? ¿Cuántos guiones de largometraje has escrito desde entonces?

HM: La peli se estrenó en mayo del 2002, e inauguró el Festival de cine español de Málaga de aquel año. Asistí a aquella gala y en general dicho episodio supone un bonito recuerdo. Desde entonces he escrito 3 guiones de largometraje más (2 bajo contrato). Si añadiéramos sinopsis, escaletas, o alguna serie de TV que otra, el número de historias en que he trabajado durante todo este tiempo crecería exponencialmente, tanto como que seguramente sería incapaz de recordarlo todo ahora mismo.

DM: ¿No puedes decirme un número aproximado? Yo creo que llevo unos treinta y tantos proyectos más o menos. Y me han contratado para escribir guiones unas 15 veces, o incluso alguna más, me parece. Tendría que comprobarlo. Sin embargo, sólo tengo tres largometrajes rodados y una película para televisión.

HM:
Vale, espera que voy a asomarme al disco duro y enseguida vuelvo...

Ya estoy otra vez. El balance sería: 19 proyectos de largometraje. De ellos uno se ha estrenado, dos están a punto de rodarse (o eso quiero creer), y uno más está terminado pero de momento en el dique seco. Diez más están en el proceso de tratamiento argumental y los otros 5 son de momento una mera sinopsis. De ellos, 6 son
adaptaciones de cómics, relatos o novelas, y el resto originales. Luego tenemos 4 series de televisión, una con la primera temporada de guiones escrita, aunque nunca producida, las otras en proyecto (existe la “biblia"). De una de esas series heredamos 5 argumentos que ahora son proyectos de TV movies, una de las cuales estoy negociando en estos días. Podríamos añadir también 4 cortometrajes -tres de ellos producidos-, unos poquitos cómics, y un proyecto de programa televisivo que también muevo a día de hoy. No sé si viene a cuento comentar también los artículos para algunas revistas de cómic, un par de relatos en prosa nunca terminados, las clases de guión que imparto y hasta una especie de tentativa como actor. De momento no me he metido a practicar la magia del Caos, pero a este paso todo se andará. De todo ello y contando lo que escribo ahora, contabilizo unos 6 ó 7 contratos como guionista.
Vaya David, que sensación más curiosa me está produciendo este "remember". Llevo encima más guerra de la que creía. Supongo que eso es bueno, ¿no?

DM: Bueno... teniendo en cuenta que mis estadísticas son aún peores que las tuyas... quiero creer que sí, que es bueno.
Yo conseguí vivir casi exclusivamente del cine durante varios años, pero desde luego mis ingresos no tenían nada que ver con los de compañeros que estaban haciendo series de televisión. Y, por otra parte, pasarse el día escribiendo páginas y páginas que no se ruedan tampoco es lo mejor para la cabeza. ¿Crees que la única manera de vivir decentemente del guión es el pluriempleo?


HM: Pues va a ser que sí. Yo en esto también he tenido un proceso parecido al tuyo. Llevo desde que empecé dedicado casi exclusivamente a los guiones de cine. Y de todo hemos tenido, desde épocas en que se me pagó muy bien y me sentí el guionista más afortunado del mundo, hasta otras en que hubo que apretarse el cinturón y pasé más miedo que una puta, con perdón. Supongo que el problema de base está en que aunque el cine español no es probablemente tan malo como lo pintan algunos, de lo que sí adolece es de una ausencia de estructura empresarial y de mercado coherente. Luego es dificilísimo que te proporcione una estabilidad a medio o largo plazo. Puedes tener un éxito de taquilla previo o haber escrito un guión condenadamente bueno con el que lleves en volandas a un productor o a un director, pero al fin y a la postre los motivos que deciden si esa película se hace o no pueden ser ajenos a la propia industria. Me refiero en concreto a las inversiones de las cadenas de televisión, que de un tiempo a esta parte parecen haber cortado el grifo, con lo que cuesta Dios y ayuda levantar cualquier proyecto. Aunque esta es mi experiencia particular y quizá otros guionistas se hayan encontrado con otras eventualidades, para bien o para mal.
Y si, yo también tengo amigos en series de TV de éxito ganando un pequeño pastizal. Hasta hace poco yo les miraba como las vacas al tren, sin terminar de entender muy bien por qué ellos estaban ahí y yo aquí, en la hoguera. De un tiempo a esta parte he cambiado el chip. Llamé a mi agente y le dije: "Corazón, a partir de ahora sólo firmamos películas que veamos que realmente pueden hacerse. Y si no, a la tele a funcionar, que también se me dio estupenda el día que la probé". Y en esas estamos, como tú bien sabes. Y es que lo de escribir y escribir historias para que luego no lleguen a realizarse es criminal para cualquier comunicador, en eso también tengo que darte toda la razón.

DM: ¿Por qué crees que ha costado tanto encontrar la financiación de los guiones de largo que has escrito? En mi caso, ha pesado mucho que en su mayor parte se trataban de proyectos más caros que la media del cine español, películas de género (terror, fantástico... hasta de ciencia ficción) que rondaban e incluso superaban de largo los 6 milllones de euros de presupuesto. Una cantidad que, o eres Guillermo del Toro, o cuesta mucho conseguir. Y por lo que hemos hablado alguna vez me da la impresión de que a ti puede haberte pasado lo mismo. ¿O no ha sido así?

HM: Ha sido exactamente así. Si hoy en día puede haber problemas para financiar una película con un presupuesto que se ajuste a la media del cine nacional... ¿con qué no te puedes encontrar al intentar levantar una que esté por encima de esas posibilidades? Y dejando de lado el hecho de que seguimos sin tener una tradición de cine de género en este país. El propio Álex de la Iglesia tuvo que recular hace varios años cuando todo parecía indicar que su siguiente película iba a ser Fu Manchú...y sin embargo rodó La Comunidad. O sea, que aun teniendo un nombre, puedes en un momento dado no tenerlas todas contigo. Yo he tenido este problema dos veces. Uno de los guiones lo he terminado por mandar a Los Angeles, ya que hay un director de allí interesado. Me consta que en estos días está en las manos de Avi Arad, responsable de Marvel Studios, pero no sé si me comeré algo. El otro sufrió una reescritura a principios de año para adaptarlo a nuestras posibilidades de producción. Quizá se ruede en breve. O quizá no.

DM: ¿Llegaste a pensar en tirar la toalla alguna vez? A lo mejor me equivoco, pero el momento más difícil suele ser cuando más o menos un par de años después de estrenar tu primera película, vas dándote cuenta de que es fácil que, si las cosas viene mal dadas, la primera sea también la última.

HM: Debe ser que soy optimista por naturaleza, pero la verdad es que ni en los momentos más difíciles he llegado a pensar que realmente la primera peli que estrené fuera a ser la última. Además, alterno esos momentos de bajón con otras experiencias más gratificantes, con lo que la cosa se compensa. Nunca he pensado en tirar la toalla porque nunca me he planteado esta profesión como un intento, una competición o una ruleta rusa laboral. Para mi escribir guiones es una extensión de mi persona, lo llevo en la sangre y quien me conoce lo sabe bien, nunca he tenido un interés real en aprender ninguna otra profesión, y jamás he trabajado en otra cosa (bueno, miento, con 15 años estuve de buzoneador y luego unos días recogiendo cebolla en el campo; sigo prefiriendo dedicarme a escribir).
En definitiva, que para mi no hay opción. Esto es lo que hago. Esto es lo que hay. Cuando las cosas vienen de cara me pongo contento, y cuando no lo hacen tampoco me rasgo las vestiduras porque lo considero un gaje más del oficio.

DM: Una última cosa: antes has comentado que tienes agente, cosa bastante inusual para un guionista español. ¿Crees que te es útil, que te ayuda a conseguir más o mejores trabajos?

HM: Claro que me es útil y claro que me ha ayudado a conseguir trabajos, si no, no estaría con ella. Ella es sobre todo una representante de actores y un amor de persona, nos conocimos porque fue profesora mía y se me enfadaba (cariñosamente) porque pasaba bastante de asistir a su clase de "derecho audiovisual". Cuando me lo reprochó le dije que no me interesaba estudiarme todo aquello, pero que ya iría a verla por su despacho el día que necesitara algún tipo de asesoría. Ella debió encontrar lógico el razonamiento, aunque calló y me miró con cara de escepticismo. Su sorpresa vino cuando a los diez días aparecí por allí con mi primer contrato...y así hasta hoy.

DM:¿Dónde la conociste?

HM:
Pues la conocí haciendo un curso de guión en la escuela de cine TAI. Previamente había estudiado una diplomatura de imagen en la Facultad de ciencias de la información en Valencia. Mi ida primigenia era acabar la licenciatura de Comunicación Audiovisual, pero no tardé mucho en darme cuenta de que si quería hacer cine aquel no era ni mucho menos el sitio indicado.
En cuanto a lo inusual del guionista con agente... Bueno, la verdad es que puede que la cosa esté cambiando. La propia María José tiene ahora en su cartera a dos o tres guionistas más por lo menos. A mi me viene bien por que me aburren mortalmente todos los papeleos de orden legal o fiscal y porque me gusta tener a alguien a quien le doy a leer un proyecto y puede saber con certeza cómo está realmente la industria "detrás de los despachos" y, sobre todo, dónde ir a colocar esa historia, o si ese es el momento adecuado, o si... qué se yo. Aunque luego, en última instancia, las decisiones siempre las tomo yo, claro.

martes, 4 de julio de 2006

Adicción

Hace mucho, mucho tiempo, hice un programa de radio que se llamaba Adicción (y antes, El garaje hermético). Lo emitía Onda Verde, y en su primera fase lo presenté con Felipe de la Fuente. Después de que Felipe lo dejara, se incorporaron Nacho Cabezas y Antonio Trashorras y aguantamos más o menos cuatro años (¿o fueron tres?, que mal se me dan las fechas). Hablábamos de cómics, televisión, cine y de todo lo que nos apetecía. Ahora mismo no me acuerdo de porqué lo dejamos. Supongo que simplemente acabamos cansándonos. Cada vez era más difícil que coincidiéramos los tres los martes a las 22:00, nuestros otros trabajos no nos dejaban suficiente tiempo para preparar el programa, lo que empezó como un hobby divertido se había convertido en una obligación… lo típico. Sí que me parece recordar cómo terminó todo: una noche, antes de empezar, viendo que ni Antonio ni Nacho llegaban, justo cuando iba a pinchar la sintonía decidí que ya estaba bien y me fui de la emisora sabiendo que no iba a volver.

Ah, me acordé del programa al descubrir en un CD esta ilustración promocional para el programa dibujada por Luis Bustos.

sábado, 1 de julio de 2006

Nuestro amigo Ígor


Hoy aparece en el periódico asturiano La Nueva España esta página de historieta que ha dibujado Javier Rodríguez sobre Ígor Medio. Y sí, Ígor era así de majo.