martes, 27 de abril de 2010

En la línea...

...de "La verdadera historia del cine".

¿Mola, no?

Y... ¿será el cartel de este señor o es solo que me lo parece a mí?

Seguro que "Absence" lo sabe.

Actualización: el que seguro lo sabe es Hernán Migoya.

El "cartel" aparece en su última novela. O sea, esta:

Fantástica

domingo, 25 de abril de 2010

Menudo futuro

"La escritura lenta, ambiciosa, exigente, se convertirá en una hazaña de ociosidad que, como en la Edad Media, sólo estará al alcance de los ricos, que no necesitan trabajar para vivir. Ese será el progreso social que habremos conquistado. Y todo por un objeto que cuesta menos que un cartón de Ducados".

De éste artículo de Almudena Grandes.

Y lo peor es que tiene razón. Escribirán (y harán películas) solo los ricos, o los demás escribiremos para los ricos. Siglo XVII... ¡allá vamos de nuevo!

domingo, 18 de abril de 2010

viernes, 16 de abril de 2010

Carlos Boyero en el País de las Maravillas

Dice Carlos Boyero en esta crítica de la última película de Tim Burton: "A saber. Que el guión no lo haya escrito Tim Burton, sino que este se limite a ilustrar con imágenes brillantes, con estética poderosamente onírica, el material que le ha entregado Linda Woolverton". A lo mejor a estas alturas no debería ocurrirme, pero siempre me sorprende lo poco que sabe sobre cómo se hacen realmente las películas alguna gente que escribe sobre cine. Para empezar, Tim Burton no ha escrito el guión de ni uno solo de sus largometrajes (aunque sí que aparece en los créditos como autor o coautor de la historia de cuatro de ellos, algo que habría tenido muy difícil en este caso, ya que se trata de la adaptación de un libro...). Pero vamos, independientemente de ese pequeño "detalle", Burton siempre ha trabajado con guionistas, incluso cuando estos han escrito a partir de conceptos suyos. Lo que más me extraña es que se sigan escribiendo críticas que parecen dar a entender que su autor no sabe que todos los directores supervisan el proceso de desarrollo de los guiones que dirigen -y más cuando tienen tanto poder como Tim Burton-. Incluso cuando no firman, el guionista escribe exactamente lo que ellos quieren. En fin...

Actualización: he visto la película y es flojucha tirando a peñazo. Pero que no, que me extraña que la "culpa" sea solo de la guionista. Lo último de Burton pertenece al subgénero "voy pa'lla, vengo pa'ca y no me importa na'". Alicia  se tranforma en un "elegido" que a base de espadazos tiene que liberar el País de las Maravillas. ¿Por qué? Pues porque sí. ¿Cómo? Por la cara.

Que raro es...

...haber coescrito la película favorita de Freddy Krueger.

miércoles, 14 de abril de 2010

Una entrevista...

...en francés con Tirso Cons y conmigo hablando de nuestra serie Le Manoir des Murmures en la página de Humanoïdes.

domingo, 11 de abril de 2010

Plata olvidada

Hace unos meses se editó por fin aquí el DVD de La verdadera historia del cine (Forgotten Silver), el documental que Peter Jackson grabó en 1995 sobre el ignoto director neozelandes Colin McKenzie. Yo lo vi hace muchísimo tiempo cuando se pasó por Canal+ y no lo había visto otra vez hasta ahora. Pero ha vuelto a parecerme una obra maestra, como entonces. La diferencia es que con 25 me pareció sobre todo divertido y ahora, con 41, me ha resultado conmovedor. Y la edición que ha salido no está nada mal. Incluye un “Making of” bastante apañado y varias escenas inéditas. 

sábado, 10 de abril de 2010

La isla interior

Por una vez estoy de acuerdo con la mayor parte de los críticos. A mí también me ha gustado “La isla interior”, la última película escrita y dirigida por Dunia Ayaso y Félix Sabroso.

La película cuenta la historia de tres hermanos de casi cuarenta años cuyo padre es esquizofrénico. Aunque no todos muestran indicios de que sea así, los tres hijos viven (o más bien, malviven) continuamente con el miedo a haber heredado su enfermedad. Pero su mayor problema no es ese sino la actitud de su madre, que en algún momento debió decidir que su vida iba a ser perfecta, y se ha empeñado en vivir como si lo fuera en contra de toda evidencia. Así, no solo niega constantemente la gravedad de la enfermedad del padre (empeñándose en creer incluso que algún día va a “curarse”), sino que no está dispuesta a considerar siquiera la posibilidad de que alguno de sus hijos pueda ser realmente infeliz. Y los tres pobrecillos, de forma más consciente en algunos casos que en otros, intentando ser lo que su madre espera de ellos se convierten en cómplices de una terrible farsa que está destruyendo sus vidas.
Muy bien escrita e interpretada, se trata de una película de producción modesta que no parece una mala TV movie (o sea, hay intención en la puesta en escena; una buena foto y una mejor dirección artística; una banda sonora en condiciones, etc.). Aparte del tema que trata y la inusual autenticidad con que lo aborda, lo que más me ha interesado de ella es que pese a que creo que no es cine para festivales (o no solo) sino una película que puede gustar mucho a todo tipo de público, está escrita… digamos que sin pensar en el público. Aquí no hay redenciones de última hora ni moralinas facilonas, o un final feliz impuesto artificialmente sobre una trama que no lo permite. Como dice Sabroso en una entrevista de la revista La gran ilusión: “(…) la mayoría de las películas hablan de héroes, de personas capaces de construir sus vidas. Ésta habla justo de lo contrario, de los que no pueden cambiar. Los personajes plantean lo que quieren hacer con sus vidas, pero no pueden”. Eso sí, me ha sorprendido que pese a lo que más se recalca en los artículos que he leído sobre ella es que Ayaso y Sabroso han abandonado la comedia, en todo momento me parece que es un drama escrito por dos guionistas que conocen muy bien los mecanismos de la comedia y que tienen muy clara la delgada línea que separa a menudo lo trágico de lo ridículo, lo conmovedor de lo patético. Dicho de otra manera, no es sólo una película “de llorar”. Te ríes, y te ríes bastante, aunque en un par de ocasiones una vez comprendes que es lo que realmente está pasando te sientas casi culpable de haberlo hecho. Y para los malpensados que se estén diciendo en este momento “ya andan los cine español haciéndose la pelota”, que conste que no conozco a ninguno de los implicados en la realización de la película. Y tampoco la he visto en el estreno. Simplemente me gustó el trailer y ayer por la tarde pagué por verla en los cines Princesa. Vamos, que obligación de hablar bien de ella, ninguna.
Ah, sí que hay algo que no me ha gustado de la película: el título. Echa un poco para atrás, ¿no?

jueves, 8 de abril de 2010

En el Previews de este mes





Que alegría, hombre. Le manoir des murmures, la serie de cómic que escribo para la editorial francesa Les Humanoïdes Associés y que ilustra Tirso Cons, va a ser publicada en Estados Unidos en seis entregas a partir del próximo junio por la división norteamericana de Humanoïdes, Humanoids Inc, con el título Whisper in the Walls. El Previews es el catálogo que usan tanto los libreros como los lectores de comics norteamericanos para hacer sus pedidos. Yo llevo comprándolo todos los meses desde lo mismo hace ya 20 años. Así que queréis... comprarlo ayer en la librería Madrid Comics, abrirlo y descubrir que un tebeo mío aparece anunciado nada menos que en cuatro páginas, me hizo bastante ilusión.Y todavía más ilusión me ha hecho ver que nuestro cómic va a aparecer allí al mismo tiempo que nada menos que el Bouncer de Jodorowsky y Boucq o una nueva edición de Los metabarones de también Jodorowsky, en este caso con Juan Giménez. No es mala compañía.


jueves, 1 de abril de 2010

Infectados

Me ha gustado mucho "Carriers" (en España "Infectados") el debut de los hermanos Alex y David Pastor. No fui a verla al cine porque no se estrenó en V.O., pero el otro día vi que se había editado en DVD y, a pesar de la horrorosa portada que le han plantado a la edición especial, en plan "Rec", la compré.
Eso sí, no tiene mucho que ver con la película que esperaba. Creía que iba a ser otra de terror con zombies posmodernos a lo "28 días después" (cosa que tampoco me parecía mal) y resulta que no, que es un sencillo dramón postapocalíptico bastante sobrio y sobre todo muy, muy triste. Estupendamente escrita, dirigida e interpretada, a pesar de que tiene pinta de haber costado cuatro duros, no importa. La forma en la que está contada la historia hace que no se eche de menos nada que no aparezca en pantalla.
Ah, un aviso si os apetece comprarla. Los extras de la supuesta “edición especial” son de lo más casposo que he visto en mucho tiempo: varias entrevistas sin interés alguno (brevísimas encima) y un "recortipega" caótico de imágenes del rodaje. Una mera excusa para meter un segundo disco y cobrar unos euros más. De vergüenza. 
Y creo recordar que leí por ahí que los Pastor van a dirigir la adaptación de una de mis novelas preferidas: “La piel fría” de Albert Sánchez Piñol* (otra historia que no es lo que parece, porque aunque no se vendió así,  tiene más de Lovecraft que de Conrad). Ojala tengan suerte y consigan sacar el proyecto adelante.

*Vaya, nada más terminar de escribir esto he leído aquí que David Slade ha sustituido a los Pastor. Que pena. Espero que Slade no haga con "La piel fría" lo que hizo con "30 días de oscuridad" y que esta vez por lo menos le salga entretenida...