lunes, 8 de febrero de 2010

Un asunto de jóvenes

"Un guión no es lo que sale en pantalla, sólo es un borrador para el director, el actor, el montador, el autor de la banda sonora (...) Cuando tomas conciencia de ello intentas protegerte un poco. De ahí que reserve lo mejor de mis capacidades para lo que puedo controlar y en lo que nadie mete mano, mis novelas. Un guión es un negocio en el que siempre hay alguien más poderoso e influyente que tú, del que tomas dictado y al que intentas hacer feliz. (...) Yo he vivido de los guiones (...) pero es una actividad más de juventud. A medida que me he hecho mayor, me he distanciado de escribir para el cine, mi tiempo es más preciado, ya no puedo involucrarme un año en un proyecto que ni siquiera sé si verá la luz. Tengo 59 años y me he vuelto impaciente (....)".

El escritor y guionista Richard Price en una entrevista del último número de la revista Qué Leer, en la que también habla de su trabajo en la serie The Wire.

Clockers, la novela de Richard Price en la que se inspiró la primera temporada de The Wire y que fue adaptada al cine por Spike Lee.