lunes, 9 de febrero de 2009

Jiro Taniguchi


“En cuanto al ligero estado de depresión que menciona, yo mismo lo siento a veces, y es que me parece necesario que el ser humano se sienta así de vez en cuando. (…) creo que si el hombre viviera en un estado de euforia constante, acabaría por explotar. La melancolía es un remedio para equilibrar el espíritu. (…) La melancolía no es una enfermedad, sino el estado más puro de un individuo, y por consiguiente el más vulnerable. Por eso, en mi opinión, estar ligeramente deprimido de vez en cuando no es en absoluto algo malo, de hecho, creo que es necesario y que lleva a la reflexión y a la calma. La euforia permanente sería agotadora. Creo que hay que conservar esa especie de vacío o de intersticio en el corazón”.

“A pesar de todo, pase lo que pase, no podré nunca dibujar por obligación, sin que me apetezca. (…) No se puede transmitir al lector nada de lo que no estés profundamente convencido. Si pudiera elegir mi ritmo de trabajo, sin duda trabajaría con más calma. No obstante, creo que es un rasgo de mi personalidad trabajar mejor con presión. Si sólo hiciera lo que quiero cuando quiero, no haría nada publicable, eso lo tengo claro. (…) si me faltaran las directrices de un editor, la idea general del público lector al que me dirijo, o una fecha de entrega, no podría trabajar de la misma forma. Si produzco tal cantidad de libros es porque hay multitud de temas que quiero tratar (…)”.

Dos extractos de una entrevista con el dibujante de manga Jiro Taniguchi que aparecen en su último álbum publicado en España, "La montaña mágica". La entrevista es muy interesante, aunque el álbum (dirigido a un público infantil) me ha parecido su obra más floja. No está mal (es una especie de "Mi vecino Totoro" mucho más sobrio), pero siendo el autor de varias obras maestras como "El almanaque de mi padre" o "El olmo del Caúcaso", la verdad es que me esperaba más.